Mansión Mon Charnaisse

Dante apolló la cabeza en el cabello de Aphrodite y suspiró.

-Vamos a dormir...

Juntos se dirigieron a dormir, desahogando las tensiones de los últimos días....

-¡Eso, venga, venga, desalojando el local, vamos!-gritó Aphrodite a todo el mundo

Dante frunció el ceño y metió un dedo en la parte trasera del cinturon que colgaba de la cintura de la chica y tiró de él arrastrandola hacia el dormitorio.

-Déjales que estarán cansados

-Eh .. ¿qué haces? Como explote algo ...-decía risueña

Aphrodite se miró a su prominente barriga y luego a Dante con expresión enigmática.

-Sí, claro

Dante sonrió y utilizó sus últimas fuerzas para llevar en brazos, algo tambaleante, a Aphrodite a la cama y taparse a su lado con las tupidas mantas, colocando una mano acariciando el hinchado vientre que portaba la vida que tanto deseaban ambos, que tanto iban a cuidar, y por la que luchaban...