Las clases...¡Qué espanto!
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Re: Las clases...¡Qué espanto!
Massiaf abrió un ojo ceñudo y dejó a Dante durmiendo en la cama tranquilamente.
El chico se mesó el pelo, y le lanzó una mirada asesina a la tal Aphrodite.
-En el lugar del que vengo a las zorras como tu las despedazan después de haberle molido cada hueso de su cuerpo a pedradas
La apuntó con un amenazante dedo directo a la cara de la chica.
-Si vuelves a atentar contra mi señor, cazareconpensas sucia y asquerosa, te sacaré los ojos por lugares que nisiquiera conoces...
En eso Dante se despertó desperezándose y se frotó un ojo.
-Umm, Massiaf...vamos a por el desayuno...
Dicho esto los dos chicos salieron por la puerta dispuestos a desayunar....
El chico se mesó el pelo, y le lanzó una mirada asesina a la tal Aphrodite.
-En el lugar del que vengo a las zorras como tu las despedazan después de haberle molido cada hueso de su cuerpo a pedradas
La apuntó con un amenazante dedo directo a la cara de la chica.
-Si vuelves a atentar contra mi señor, cazareconpensas sucia y asquerosa, te sacaré los ojos por lugares que nisiquiera conoces...
En eso Dante se despertó desperezándose y se frotó un ojo.
-Umm, Massiaf...vamos a por el desayuno...
Dicho esto los dos chicos salieron por la puerta dispuestos a desayunar....
Re: Las clases...¡Qué espanto!
-¿Esas tenemos? Muy bien-respondió alzando la voz.
Y apartir de esa noche Aphrodite tuvó visitas nocturas, obviamente masculinas.. hasta que sus compañeros de cuarto se cansaron y ..
Y apartir de esa noche Aphrodite tuvó visitas nocturas, obviamente masculinas.. hasta que sus compañeros de cuarto se cansaron y ..
Aphrodite Astarté- Algo me dice que tienes algo mas que un cuerpo...
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Re: Las clases...¡Qué espanto!
Dante tenía un dolor de cabeza como si le hubieran batido los sesos y luego, después de cocerlos y volver a ponerselos en el cráneo, le hubieran cosido la cabeza dejándola tal y como estaba antes.
Se coló por la ventana y se tumbó en su cama sin mirar siquiera a Aphrodite que yacía entre los brazos de un tipo que nisiquiera miró, pero sabía que estaría allí y que habrían estado molestando a Massiaf toda la noche.
El chico se metió en su cama ignorando el alboroto, pero al poco rato se dió cuenta de que no podía dormir, asíq eu fué a darse una ducha, llamando a su compañero con una mano.
Se señaló la espalda, una vez metidos los dos en la bañera y dijó con voz suficientemente alta.
-Frótala, ya sabaes como, quiero que me hagas olvidar todas mis penas
El guardaespaldas, contento de poder hacer algo por su señor, comenzó a frotarle la espalda a Dante, con lo que el joven amo comenzó a gemir(no a lo bestia, sino suavecito, como un ronroneo), oyéndose también el chapoteo.
Dante comenzó a relajarse poco a poco, y los músculos de su cráneo se destensaron aliviándole un poco. Soltó un satisfecho y placentero suspiro.
Se giró en la bañera y comenzó a frotar la espalda de su amigo de la infancia, con la esponja.
-Ahora relájate y dejame a mi...
Se coló por la ventana y se tumbó en su cama sin mirar siquiera a Aphrodite que yacía entre los brazos de un tipo que nisiquiera miró, pero sabía que estaría allí y que habrían estado molestando a Massiaf toda la noche.
El chico se metió en su cama ignorando el alboroto, pero al poco rato se dió cuenta de que no podía dormir, asíq eu fué a darse una ducha, llamando a su compañero con una mano.
Se señaló la espalda, una vez metidos los dos en la bañera y dijó con voz suficientemente alta.
-Frótala, ya sabaes como, quiero que me hagas olvidar todas mis penas
El guardaespaldas, contento de poder hacer algo por su señor, comenzó a frotarle la espalda a Dante, con lo que el joven amo comenzó a gemir(no a lo bestia, sino suavecito, como un ronroneo), oyéndose también el chapoteo.
Dante comenzó a relajarse poco a poco, y los músculos de su cráneo se destensaron aliviándole un poco. Soltó un satisfecho y placentero suspiro.
Se giró en la bañera y comenzó a frotar la espalda de su amigo de la infancia, con la esponja.
-Ahora relájate y dejame a mi...
Re: Las clases...¡Qué espanto!
Aphrodite semidesnuda pero tapando sus encantos interrumpio el gozo de los dos jóvenes.
-¿Qué demonios .. ?.-gritaba.-¿Qué coño haceis? Tú.-señalando a Dante.-¿Por qué gemías? Y tú.-señalando a Massiaf.-Fuera y encárgate del tio que hay en mi cama.-tomó aire.-Es una orden.
-¿Qué demonios .. ?.-gritaba.-¿Qué coño haceis? Tú.-señalando a Dante.-¿Por qué gemías? Y tú.-señalando a Massiaf.-Fuera y encárgate del tio que hay en mi cama.-tomó aire.-Es una orden.
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Re: Las clases...¡Qué espanto!
Esa era la gota que colmó el vaso.
-Hazlo-dijo Dante
Massiaf salió sonriente a mas no poder de la bañera, totalmente desnudo y algo excitado por lo que venía a continuación y se dirigió al vidé. Hurgó bajo él y sacó una pistola silenciada que había en un falso fondo de madera blanca y desapareció por la puerta empujando a Aphrodite dentro y cerrando la puerta
-Alá sea contigo-Se oyó su voz amortiguada por la pared, seguida de dos zumbidos y un peso que caía al suelo.
Dante se giró lentamente con la ira reflejada en los ojos, por primera vez en lo que llevaba compartiendo cuarto con Astarté. No era algo que probocara risa.
-Furcia celosa,¿Quién crees que eres para entrar en MI baño mientras estoy con MI sirviente, sin siquiera llamar, darle órdenes y encima molestar más de lo que ya molestas?¿Por qué no cojes un avión y te vuelves a tu casa donde tus papás te malcríen como tanto te gusta?
-Hazlo-dijo Dante
Massiaf salió sonriente a mas no poder de la bañera, totalmente desnudo y algo excitado por lo que venía a continuación y se dirigió al vidé. Hurgó bajo él y sacó una pistola silenciada que había en un falso fondo de madera blanca y desapareció por la puerta empujando a Aphrodite dentro y cerrando la puerta
-Alá sea contigo-Se oyó su voz amortiguada por la pared, seguida de dos zumbidos y un peso que caía al suelo.
Dante se giró lentamente con la ira reflejada en los ojos, por primera vez en lo que llevaba compartiendo cuarto con Astarté. No era algo que probocara risa.
-Furcia celosa,¿Quién crees que eres para entrar en MI baño mientras estoy con MI sirviente, sin siquiera llamar, darle órdenes y encima molestar más de lo que ya molestas?¿Por qué no cojes un avión y te vuelves a tu casa donde tus papás te malcríen como tanto te gusta?
Re: Las clases...¡Qué espanto!
-Porque tú me echarías tanto de menos que tendría que pegarte un tiro. Y no estoy de broma. ¿Quieres luchar por el cuarto? ¿De igual a igual? Declárame la guerra, hazlo
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Re: Las clases...¡Qué espanto!
La cara de Dante se sumió en una pintoresca mezcla de enfado y risa durante unos segundos.
Luego estalló en carcajadas.
A los pocos segundos, se pasó una mano por la cara, para tranquilizarse y respondió.
-Antes de que tu bala rozara mi cuerpo, el tuyo estaría malamente destrozado en una esquina oscura jajajaj, y ¿Qué es eso de iguales? Tu no eres mi igual, No puedes siquiera imaginar la cantidad de trampas mortales que te apuntan cada noche, no sabes la cantidad de matices que pueden matarte, no tienes ni idea. Puede que yo no sepa ni me interese por la razon por la que ciertas noches vuelves cubierta de sangre, pero creo que puedo decir sin equivocarme que tu no sabes nada de mi, ¿Quieres la guerra? Mañana estarás muerta jajajaja...
Luego estalló en carcajadas.
A los pocos segundos, se pasó una mano por la cara, para tranquilizarse y respondió.
-Antes de que tu bala rozara mi cuerpo, el tuyo estaría malamente destrozado en una esquina oscura jajajaj, y ¿Qué es eso de iguales? Tu no eres mi igual, No puedes siquiera imaginar la cantidad de trampas mortales que te apuntan cada noche, no sabes la cantidad de matices que pueden matarte, no tienes ni idea. Puede que yo no sepa ni me interese por la razon por la que ciertas noches vuelves cubierta de sangre, pero creo que puedo decir sin equivocarme que tu no sabes nada de mi, ¿Quieres la guerra? Mañana estarás muerta jajajaja...
Re: Las clases...¡Qué espanto!
-Acepto el trato. Cada uno poseerá una K-98 y a elegir entre sai, falcata o daga. La batalla no acabará hasta que uno de los dos muera .. o se rinda. Y aunque vayas a decir que jamás las usarías.. las protecciones no son válidas.-le recitó a Dante. Y sin más salió del baño, cogió un abrigo y se acurrucó en el tejado del internado.
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Re: Las clases...¡Qué espanto!
Dante se estrechó de hombros y siguió metido en la bañera. Él seguía sus propias normas.
Cerró los ojos y se relajó, aparentemente indefenso, sumido en una tranquilidad total sus demás sentidos tomaron la delantera enterándose de todo lo que pasaba a su alrededor.
Massiaf se había ido a deshacerse del cadáver, y no volvería en toda la noche. El joven se tomaba muy en serio las faltas de honor como aquella, y pensaba que había que solucionarlas por uno mismo.
Dante pensó que quizás el sai sería la mejor opción, así que abrió su armario y cojió uno con refuerzos de un metal diferente en la base del mango.
El viento se colaba por la ventana abierta, oía los sonidos del tráfico nocturno de Madrid. Pisadas en el techo, y luego, nada...
Dante se tumbó en la cama y cerró los ojos, preparado para defenderse...
Cerró los ojos y se relajó, aparentemente indefenso, sumido en una tranquilidad total sus demás sentidos tomaron la delantera enterándose de todo lo que pasaba a su alrededor.
Massiaf se había ido a deshacerse del cadáver, y no volvería en toda la noche. El joven se tomaba muy en serio las faltas de honor como aquella, y pensaba que había que solucionarlas por uno mismo.
Dante pensó que quizás el sai sería la mejor opción, así que abrió su armario y cojió uno con refuerzos de un metal diferente en la base del mango.
El viento se colaba por la ventana abierta, oía los sonidos del tráfico nocturno de Madrid. Pisadas en el techo, y luego, nada...
Dante se tumbó en la cama y cerró los ojos, preparado para defenderse...
Re: Las clases...¡Qué espanto!
La puerta del cuarto se abrió de repente, de un sólo golpe.
-Venga mátame.-le ordenó la desarmada Aphrodite.
-Venga mátame.-le ordenó la desarmada Aphrodite.
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Re: Las clases...¡Qué espanto!
Dante se levantó con parsimonia y se colocó frente a Aphrodite.
-Normalmente los modales serían lo primero, pero esta vez la habitación está en juego
Con un rápido movimiento desenfundó el sai y lo bajó hasta su propio muslo clavándolo con cuidado de no dañar ningún hueso. Con un gemido cayó sobre la rodilla dañada, y clavó el sai en el suelo.
-Los modales son los modales en realidad, las damas primero...
-Normalmente los modales serían lo primero, pero esta vez la habitación está en juego
Con un rápido movimiento desenfundó el sai y lo bajó hasta su propio muslo clavándolo con cuidado de no dañar ningún hueso. Con un gemido cayó sobre la rodilla dañada, y clavó el sai en el suelo.
-Los modales son los modales en realidad, las damas primero...
Re: Las clases...¡Qué espanto!
-Eres imbécil.-respiró profundamente.- Muy bien, el cuarto todo tuyo, yo me marcho.-y empezó a empaquetar sus cosas.
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Re: Las clases...¡Qué espanto!
Dante rajó su camiseta y se vendó la pierna. Luego observó a la chica y suspiró exasperado.
-¿Tan gorda la montas para luego sucumbir ante las primeras gotitas de sangre? Ja, no se que haces con esa fachada de chica mala, ni porqué escondes esa preciosa y sensible personalidad que habita en tu interior, solo se que te hecharé de menos si te vas...a ti no a esos que te traes¬¬
Una vez que acabó de vendarse la herida, Dante se levantó con un gruñido de dolor, y se plantó ante ella.
-¿Ya has acabado aquí,entonces? No me considero suficientemente importante como para retenerte por mas que quiera, así que te deseo un buen viaje, y que ojalá la próxima vez puedas quedarte más tiempo en donde sea que vallas...-se sentó de nuevo en la cama- te acompañaría a tu transporte pero-señalando la herida-creo que si lo hago acabaré desangrado...
-¿Tan gorda la montas para luego sucumbir ante las primeras gotitas de sangre? Ja, no se que haces con esa fachada de chica mala, ni porqué escondes esa preciosa y sensible personalidad que habita en tu interior, solo se que te hecharé de menos si te vas...a ti no a esos que te traes¬¬
Una vez que acabó de vendarse la herida, Dante se levantó con un gruñido de dolor, y se plantó ante ella.
-¿Ya has acabado aquí,entonces? No me considero suficientemente importante como para retenerte por mas que quiera, así que te deseo un buen viaje, y que ojalá la próxima vez puedas quedarte más tiempo en donde sea que vallas...-se sentó de nuevo en la cama- te acompañaría a tu transporte pero-señalando la herida-creo que si lo hago acabaré desangrado...
Re: Las clases...¡Qué espanto!
La joven lo miró con cara de asco, cogió sus cosas y se fue hasta la puerta. Antes de abrirla echó un vistazo al cuarto, cuando terminó de observarla, sin dirigirle ni una palabra salió de la habitación, para volver a su instituto. Probablemente les contaría alguna que otra mentira sobre su estancia, y a los profesores les diría que era el ambiente, que no le sentaba bien. Todos la creerían.
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Re: Las clases...¡Qué espanto!
El tiempo se detubo durante dos segundos para Dante.
Probablemente fuera el flujo desmedido de adrenalina, pero él no pensó en eso durante sus segundos de total lucidez.
En esos dos segundos, Dante sintió que algo se desgarraba en su interior, algo que ya había sentido con la muerte de sus padres y no quería recordar. También sintió que de lo que quedaba sano de su corazón, un hilo invisible tiraba amenazando con romperse. Ese hilo conectaba con el corazón de ella. No sabía como lo había descubierto, ni porque pasaba esto, pero supo que si ese hilo se rompía, su vida dejaía de tener el sentido que podía haber adquirido. El no lo hecharía de menos, al menos no directamente, pues aun no había descubierto ese sentido, pero supo que si la dejaba ir toda su vida se preguntaría qué hubiera pasado si la hubiese retenido.
A ella, esa chica nueva y desagradable, ruidosa y mandona, con aires de superioridad y genio facil.
Era superior a sus fuerzas, pensó él, en un intento de desterrar esos pensamientos de su cabeza. Pero esa era una escusa para débiles, y si algo se consideraba, era una persona psicológicamente fuerte en gran medida.
Dos segundos paron, y Dante se levantó sujetando del brazo a la chica.
-Tu no vas a ninguna parte, esta es MI habitación ahora, y he decidido compartirla civilizadamente contigo, así que te quedas y cumples tu apuesta- la sonrisa de Dante se aflojó un poco-Empezemos de nuevo, ¿Vale? Me llamo Dante Mon Charnaisse, y voy a compartir habitación contigo, espero que nos llevemos bien, y que hagamos cosas interesantes juntos-Esta vez en su voz no había ironía alguna, sino sinceridad-Venga, héchame una mano o de veras me desangraré^^
Sin esperar a que dijera nada Dante la tomó cariñosamente de la mano y la atrajo dentro de la habitacion, dejando la puerta abierta, pués si ella verdaderamente deseaba irse, el no podía detenerla, al menos en ese estado...
Probablemente fuera el flujo desmedido de adrenalina, pero él no pensó en eso durante sus segundos de total lucidez.
En esos dos segundos, Dante sintió que algo se desgarraba en su interior, algo que ya había sentido con la muerte de sus padres y no quería recordar. También sintió que de lo que quedaba sano de su corazón, un hilo invisible tiraba amenazando con romperse. Ese hilo conectaba con el corazón de ella. No sabía como lo había descubierto, ni porque pasaba esto, pero supo que si ese hilo se rompía, su vida dejaía de tener el sentido que podía haber adquirido. El no lo hecharía de menos, al menos no directamente, pues aun no había descubierto ese sentido, pero supo que si la dejaba ir toda su vida se preguntaría qué hubiera pasado si la hubiese retenido.
A ella, esa chica nueva y desagradable, ruidosa y mandona, con aires de superioridad y genio facil.
Era superior a sus fuerzas, pensó él, en un intento de desterrar esos pensamientos de su cabeza. Pero esa era una escusa para débiles, y si algo se consideraba, era una persona psicológicamente fuerte en gran medida.
Dos segundos paron, y Dante se levantó sujetando del brazo a la chica.
-Tu no vas a ninguna parte, esta es MI habitación ahora, y he decidido compartirla civilizadamente contigo, así que te quedas y cumples tu apuesta- la sonrisa de Dante se aflojó un poco-Empezemos de nuevo, ¿Vale? Me llamo Dante Mon Charnaisse, y voy a compartir habitación contigo, espero que nos llevemos bien, y que hagamos cosas interesantes juntos-Esta vez en su voz no había ironía alguna, sino sinceridad-Venga, héchame una mano o de veras me desangraré^^
Sin esperar a que dijera nada Dante la tomó cariñosamente de la mano y la atrajo dentro de la habitacion, dejando la puerta abierta, pués si ella verdaderamente deseaba irse, el no podía detenerla, al menos en ese estado...
Re: Las clases...¡Qué espanto!
Aphrodite, por un momento no reaccionó, pero cuando lo hizo su mano descargó un gran y sonoro tortazo en la mejilla izquierda de Dante. Salió corriendo dejando todas sus pertenencias, pero no le importaba, quería irse, muy lejos.
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Re: Las clases...¡Qué espanto!
Dante se volteó con el impulso y tomó el sai del suelo.
Aphrodite corría hacia la puerta, tenía que atravesar el pasillo.
Había una oportunidad. Con una rapidez extrañamente falta de humanidad, Dante quitó el refuerzo metálico del sai y pulsó un botón de su interior. La sala y el pasillo se inundó de un gas azul que sumía en la inconsciencia a quien lo inhalaba en apenas unos segundos.
En cuanto lo olió, Aphrodite calló al suelo, desmayada, dormiría unas horas.
Por suerte, Dante había perdido una cantidad interesante de sangre, por lo que el veneno tardó en extenderse y antes que de se apoderara de él ya se había puesto una mascarilla antigas que guardaba detrás del marco de la cama.
Haciendo bastantes esfuerzos consiguió llegar hasta Aphrodite y tirar de ella hasta la cama doble, dejándo que descansara. Él no se podía permitir arriesgarse a que ella escapara, así que cuando el gas se hubo ventilado, pulsó el botón oculto que los aislaba del exterior y se tumbó allí a su lado, cansado por la pérdida de sangre.
Se obligó a apretarse las vendas de la herida y cerró los ojos sumiéndose en unos ajetreados sueños en los que corría tras Astarté, mas nunca llegaba a alcanzarla...
Aphrodite corría hacia la puerta, tenía que atravesar el pasillo.
Había una oportunidad. Con una rapidez extrañamente falta de humanidad, Dante quitó el refuerzo metálico del sai y pulsó un botón de su interior. La sala y el pasillo se inundó de un gas azul que sumía en la inconsciencia a quien lo inhalaba en apenas unos segundos.
En cuanto lo olió, Aphrodite calló al suelo, desmayada, dormiría unas horas.
Por suerte, Dante había perdido una cantidad interesante de sangre, por lo que el veneno tardó en extenderse y antes que de se apoderara de él ya se había puesto una mascarilla antigas que guardaba detrás del marco de la cama.
Haciendo bastantes esfuerzos consiguió llegar hasta Aphrodite y tirar de ella hasta la cama doble, dejándo que descansara. Él no se podía permitir arriesgarse a que ella escapara, así que cuando el gas se hubo ventilado, pulsó el botón oculto que los aislaba del exterior y se tumbó allí a su lado, cansado por la pérdida de sangre.
Se obligó a apretarse las vendas de la herida y cerró los ojos sumiéndose en unos ajetreados sueños en los que corría tras Astarté, mas nunca llegaba a alcanzarla...
Re: Las clases...¡Qué espanto!
Despertó de su inconsciencia medio aturdida y lo vió tendido a su lado. Se mareó, pero reunió fuerzas para levantarse sigilosamente y acercarse a la puerta.
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Re: Las clases...¡Qué espanto!
-No puedes salir-Susurró Dante, aún con los ojos cerrados.
Tenía la cara más pálida que de costumbre, pero parecía que la sangre había dejado de fluir y la herida no se había infectado.
-No puedes irte, te necesito a mi lado
Su voz no era mas que un susurro en la oscuridad. Uno de esos susurros que nunca oyes, hasta que ese alguien especial susurra para ti, y tu que le estas escuchando las 24 horas, antento a él, captas y escuchas por primera vez, sorprendiéndote de lo que te estabas perdiendo sin saberlo...
Tenía la cara más pálida que de costumbre, pero parecía que la sangre había dejado de fluir y la herida no se había infectado.
-No puedes irte, te necesito a mi lado
Su voz no era mas que un susurro en la oscuridad. Uno de esos susurros que nunca oyes, hasta que ese alguien especial susurra para ti, y tu que le estas escuchando las 24 horas, antento a él, captas y escuchas por primera vez, sorprendiéndote de lo que te estabas perdiendo sin saberlo...
Re: Las clases...¡Qué espanto!
-Búscate una madurita de esas de cuarenta años y déjame en paz.-le respondió furiosa.
Aphrodite golpeó la puerta hasta que se cansó; después intentó buscar sus armas, pero no las encontró; chilló y finalmente se acurrucó en una esquina de la habitación, lo más alejada de él.
Aphrodite golpeó la puerta hasta que se cansó; después intentó buscar sus armas, pero no las encontró; chilló y finalmente se acurrucó en una esquina de la habitación, lo más alejada de él.
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Re: Las clases...¡Qué espanto!
Dante no entendía lo de la madurita.
Su cabeza daba vueltas, el esfuerzo de hablar había sido demasiado grande.
Susurró algo aún mas bajo, que la chica, desde su lugar no pudo oir, pero que iba destinado a ella
Su cabeza daba vueltas, el esfuerzo de hablar había sido demasiado grande.
Susurró algo aún mas bajo, que la chica, desde su lugar no pudo oir, pero que iba destinado a ella
Re: Las clases...¡Qué espanto!
-No me hables, si me vas a tener prisionera, por lo menos amordázame y mátame de inanición.
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Re: Las clases...¡Qué espanto!
Dante cerró los ojos.
Media hora después, reunió las fuerzas para girarse. Ahora podía mirarla.
¿Qué era?¿Qué era eso que le había llamado?
No parecía diferente a las demás pijas consentidas que conocía...pero...
Tenía algo especial, no sabía decir que, pero estaba ahí...
Media hora después, reunió las fuerzas para girarse. Ahora podía mirarla.
¿Qué era?¿Qué era eso que le había llamado?
No parecía diferente a las demás pijas consentidas que conocía...pero...
Tenía algo especial, no sabía decir que, pero estaba ahí...
Re: Las clases...¡Qué espanto!
-¿Qué miras?-respiró.
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